La pequeña de la casa fue creciendo y poco a poco parecía que me distanciaba menos de mis hermanas mayores con quienes ya podía competir en las notas; algunas veces ganaron ellas y otras yo. No en vano dispongo de Profesora de Química y Física, Médico, Ingeniero de Materiales y Fisioterapista en la familia.
Mis primeras negociaciones tuvieron que ver con la prensa: quién leía los periódicos primero estaba claro, pero... ¿siempre iba a ser yo la última? Si cada una de mis hermanas se caracterizaban en algo yo me especialicé en el terreno de la empatía, la seducción y en la asertividad de mis oportunidades.
Mis primeras negociaciones tuvieron que ver con la prensa: quién leía los periódicos primero estaba claro, pero... ¿siempre iba a ser yo la última? Si cada una de mis hermanas se caracterizaban en algo yo me especialicé en el terreno de la empatía, la seducción y en la asertividad de mis oportunidades.
Me gusta compaginar: colaboraba en actividades y eventos benéficos organizados por el propio centro donde cursé estudios, de los Padres Pasionistas; así como, en los grupos de amistad formados después de la Confirmación en Juventudes Marianas Vicencianas. Allí nos estrenamos como guionistas, iluminadores y sonidistas, sastres, realizadores y productores, incluso actores, de nuestras primeras obras de teatro; grandes estrenos con multitud de público solidario. También aprendimos a expresarnos delante de espectadores numerosos, a organizar y a llevar las cuentas de la tesorería.
Por aquél entonces, ya disfrutaba con la escritura de historias literarias y pequeños artículos de actualidad. Mi deporte favorito: el tenis.
Casi sin darme cuenta, había cumplido mi mayoría de edad… hicimos una gran fiesta en casa y, un poco más tarde, había obtenido el título de Bachiller en Ciencias.
